El derecho a la defensa en Panamá abarca un espectro amplio de garantías, entre las que destacan:

  • Derecho a ser informado: El imputado tiene derecho a ser informado de manera clara y precisa sobre los cargos que se le imputan, las pruebas en su contra y los derechos que le asisten durante el proceso.

  • Derecho a elegir abogado: El imputado tiene la libertad de elegir un abogado de su confianza para que lo represente y defienda durante todo el proceso. En caso de no contar con recursos económicos para contratar un abogado, el Estado le proveerá uno de oficio.

  • Derecho a guardar silencio: El imputado tiene derecho a guardar silencio y no declarar en su contra. Esta garantía le permite protegerse de autoincriminarse y de brindar información que pueda ser utilizada en su perjuicio.

  • Derecho a la asistencia del abogado durante la investigación: El abogado del imputado tiene derecho a estar presente durante las diligencias investigativas, como interrogatorios, reconocimientos y careos, a fin de velar por los derechos de su defendido.

  • Derecho a presentar pruebas: El imputado tiene derecho a presentar pruebas que sustenten su inocencia o desvirtúen las acusaciones en su contra.

  • Derecho a un juicio oral y público: El imputado tiene derecho a un juicio oral y público donde se presentarán las pruebas y se escucharán los alegatos de las partes.

  • Derecho a recurrir las decisiones: El imputado tiene derecho a recurrir las decisiones judiciales que lo afecten,buscando una revisión por parte de un tribunal superior.